martes, 6 de abril de 2010

Bruma y espuma (nadie sabe lo que pierde)

Porque tuviste que irte para encontrarme
yo siempre supe que te pertenecía
Hoy finalmente querés buscarme
Y yo no tengo deseos de vivir esta agonía

Te di mil oportunidades de abrazarme
y me ahogué en desesperación cuando te fuiste
Aprendí a golpes que amarte duele
Pero duelen más los golpes de aprender a amarte.

Dejame volver como la espuma (con sabor a agua salada)
que crece y vuela, que se eleva y calla
Dejame desaparecer como la bruma (con olor a tierra mojada)
que quema y arde, que crece y vuela

Te di un millón de chances para amarme
e ignoré mil veces las señales para odiarte
Aprendí a golpes que amarte duele
Pero duelen más los golpes de aprender a amarte.

Dejame volver como la espuma (con sabor a agua salada)
que crece y vuela, que se eleva y calla
Dejame desaparecer como la bruma (con olor a tierra mojada)
que quema y arde, que crece y vuela

Nadie aprende más que quien camina dos veces
se sumerge en el agua, se sostiene en el abismo
Nadie crece más que quien tropieza mil veces
levita en el espacio, se mantiene a flote en el vacío

Dejame volver como la espuma (con esencia a mar profundo)
que crece y vuela, que se eleva y calla
Dejame desaparecer como la bruma (con textura de arena blanca)
que quema y arde, que crece y vuela


Sasha C

1 comentario:

  1. Creo que ya es por deporte que damos un millón de chances para que nos amen e ignorar las otras señales.
    Pero creo que eso nos hace mujeres, y por eso, no me quejo!
    Saludos, me gusto mucho tu blog.

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